En medio de la controversia por la decisión del gobierno de acelerar la transición energética, renunciando al otorgamiento de nuevos contratos de exploración, Ecopetrol reveló que durante el tercer trimestre alcanzó ingresos de $35,1 billones y que sus utilidades netas cayeron un 46.5%, pasando de $9.5 billones a $5.1 billones.
A pesar ello, el presidente de la compañía, Ricardo Roa, es optimista y en entrevista con Forbes habló de la transformación de Ecopetrol, de su rol en la transición y del papel que jugará el hidrógeno verde como apalancador de las energías renovables no convencionales.
¿Satisfecho con los resultados del tercer trimestre?
Sí, pero es difícil verlos y analizarlos frente al mismo período del año pasado. Siempre van a decir que las utilidades se desplomaron, pero estamos hablando de US$21 menos en el barril. Pero en lo que corresponde a nuestro margen de control y de maniobra, estamos satisfechos…
Hablemos de la coyuntura…
Hemos tenido avances importantes en la actividad exploratoria. En ese frente estamos hablando de 20 pozos y de ellos 10 han sido exitosos en el piedemonte, en Tumaco, Glaucus 1… son yacimientos con recursos importantes de crudo y gas. Y en el offshore en gas natural. Estos hallazgos son fundamentales para garantizar la extensión de las reservas en un período mayor al que ya tenemos establecido. Estas reservas y estos recursos van a ir teniendo unos desarrollos y pasarán de contingentes a probables, posibles y probadas, en un trabajo conjunto con nuestros aliados, Shell, Oxy y Petrobras, en el offshore para poder desarrollar y materializarlas.
¿Cuál es el balance en materia de producción?
Los resultados son históricos. Al corte del tercer trimestre teníamos expectativas entre 720.000 y 725.000 barriles diarios y alcanzamos 741.000 barriles diarios. Tuvimos un pico importante en octubre en el día 12, una producción de 769.000 barriles gracias a la mayor capacidad que estamos desarrollando en nuestros campos en la senda de la producción.
¿A cuánto asciende la inversión ejecutada este año?
La meta de este año son US$5.500 millones que incluye todo. No solo la búsqueda y la exploración y producción, sino también el recobro mejorado, las inversiones asociadas en refinerías y las asociadas al negocio de soluciones de base inicial….
¿Ya definieron el plan de inversiones para el 2024 sobre el que ha habido controversia?
En una próxima junta, este mismo mes, vamos a poner a su consideración el presupuesto general de gastos, costos y de inversiones de Ecopetrol y sus filiales. Y en esa medida estamos llevando un par de escenarios de tener al menos el mismo nivel de producción con el que estamos cerrando 2023, que va a estar muy cercano a 731.000 barriles día.
¿Han contemplado una reducción en el nivel de inversiones como lo denunció la USO?
No. Insisto en que estamos prácticamente tratando o manejando un escenario alto y medio, aunque esto va a depender básicamente de a qué le estamos apuntando el año entrante. Pero la premisa es al menos asegurar el mismo nivel de producción con el que cerremos este año.
Sobre la exploración costa afuera, los críticos dicen que es una apuesta riesgosa y más costosa…
Todo el negocio de esta industria es altamente riesgoso y combina una incertidumbre muy alta con las expectativas de existencias de recursos que viabilicen su comercialización y colocación. Pero básicamente estas son las apuestas de todos los jugadores en un mercado como este, no solo Ecopetrol. Estamos hablando de que en el peor de los mundos vamos a estar incorporando reservas entre 2,5 y 4,5 terapies cúbicos y en el mejor de los mundos podemos estar hablando de entre 10 y 12,5 terapies cúbicos de gas en todos estos bloques exploratorios que estamos teniendo de acá al 2027.
Hablemos del impacto del Fpec y de los subsidios a la gasolina en las finanzas en Ecopetrol… ¿cómo va el saneamiento y cómo recibe los anuncios del gobierno para reducir el déficit?
Al cierre del tercer trimestre estamos en $22 billones de recursos del Fpec. Hay que recordar que al cierre del 31 de diciembre veníamos de $33 billones, o sea, ya hay una reducción importantísima. Al cierre del 2023 esperamos que se complete el 100% de los recursos financiados de la vigencia del 2022 y que en 2024 este monto de financiación se acerque a los $20-21 billones. Es reducción es importante porque la permite a Ecopetrol una mayor liquidez para apalancar su operación y sus planes de inversión. Esperamos que en un año o año y medio se normalice la situación.
¿Están tranquilos con el actual nivel de endeudamiento de Ecopetrol?
Nuestra meta es estar en una relación deuda-Ebitda menor a 2.5 y hoy estamos menos de 2.3… Entonces de todas maneras estamos apalancando nuestras operaciones, pero estamos mirando otras figuras como los project finance y recursos con terceros, con los socios y aliados que nos permitan tener esa flexibilidad en el manejo del apalancamiento financiero. También tenemos la capacidad de ir al mercado a refinanciar deuda, reperfilar y buscar otros esquemas de apalancamiento para el desarrollo de los proyectos.
¿Qué tanto le ha pegado la reforma tributaria del año pasado a Ecopetrol?
Al tercer trimestre del año, Ecopetrol está reportando unas transferencias a la Nación de $45,1 billones, cuando en el mejor de los mundos en todo el año pasado fueron de $42,4 billones y uno de los componentes importantes sí son los impuestos… el año pasado en total fueron $10,5 billones. Este año en el tercer trimestre ya vamos en $15,92 billones en impuestos. El año pasado en dividendos la Nación recibió transferencias por $16,3 billones y al cierre de este tercer trimestre está recibiendo $16,4 billones.
¿Cómo el objetivo de convertir a Ecopetrol en una empresa de energía? ¿Eso no la desvía de su foco principal?
Ecopetrol ya es una empresa de energía, uno de los principales jugadores con 1.300 megavatios de capacidad instalada. El petróleo y el gas son energía, de modo que no hay una pérdida de la razón de ser, sino más bien una orientación hacia una nueva explotación de recursos. Ecopetrol tiene un rol de consumidor, pero a la vez el desafío de convertirse en esa gran empresa de recursos energéticos dentro de los que están el amoniaco, el hidrógeno verde, el azul, las energías renovables a partir de fuentes no convencionales (eólica y solar) en la transición energética. En nuestro plan estratégico al 2040 se incorporan muchos recursos en la matriz con fuentes de energías no convencionales. De hecho, estamos adelantando esa meta de tener 900 megavatios de energías renovables del 2030 al 2025. Al 2030 esperamos que la meta sea 1,9 gigas y al 2040 estar hablando de 3 a 4 gigas de energías renovables para apalancar la producción costo-eficiente del hidrógeno verde.
¿Qué papel jugará el hidrógeno?
El hidrógeno verde es la gran aspiración de Ecopetrol en ese gran potencial que tenemos de ser productores de energías limpias con fuentes renovables no convencionales. En buena medida se destinará a atender nuestras demandas propias en las refinerías que hoy son de 130.000 toneladas al año. Nosotros tenemos capacidad para transformar los 1.300 megavatios de energía proveniente de los combustibles fósiles, el diésel y el gas natural a energías nuevas y renovables como el hidrógeno verde como gran vector. Allí está la gran apuesta de Ecopetrol.
¿Qué papel jugará el gas en la transición energética?
La gran apuesta está en los recursos prospectivos, contingentes, probables, posibles y probadas con nuestros aliados para traer esas reservas. El gas natural es el elemento esencial de la transición energética, ya que nos brinda la firmeza y la confiabilidad que no tienen el sol y el viento.
¿Pero se descarta que haya nuevas áreas de exploración?
Toda la exploración en el offshore es justamente para buscar. Nosotros hemos estado interactuando con el Ministerio de Minas en mesas técnicas y por ahora hemos puesto el énfasis en reactivar 8 contratos suspendidos por diversas razones, algunas de orden público, relaciones con las comunidades, licencias ambientales, etc. Estamos reactivando esos 8 contratos que fueron declarados en suspensión por la ANH.